(CNN Español) — Un grupo de monjas brasileras de la organización Fraternidad Pobres de Jesucristo anunció este lunes a través de un comunicado que seguirá su servicio desde El Salvador, luego de siete años de cumplir labores religiosas y humanitarias en Nicaragua.
Varios defensores de derechos humanos y allegados a las religiosas denunciaron este domingo que la Policía de Nicaragua allanó el lugar donde ellas habitaban. Incluso pidieron respeto a su integridad.
Según dijo una fuente de la iglesia católica a CNN, todo es una consecuencia de que el gobierno está renovando los documentos de residente a misioneros extranjeros.
CNN ha buscado una reacción del gobernador de Nicaragua, sin respuesta aún.
La organización Fraternidad Pobres de Jesucristo, movimiento que nació en Brasil y tuvo presencia en la educación de un país, se caracteriza por la gestión alimentaria y la cobertura de necesidades básicas para grupos de riesgo social.
El gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, mantiene una campaña contra la iglesia católica nicaragüense.
Recientemente dijo qua parte de una red de lavado de dinero qu’presuntamente involucra a personas previamente condenadas por «Traición a la Patria» y varias diócesis del país, sin dar detalles específicos, de acuerdo con un comunicado de prensa publicado por la Policía Nacional.
Las investigaciones anunciadas por lavado de dinero representan el último episodio de una serie de acciones emprendidas por el régimen de Ortega contra la iglesia católica, que solo en lo que va del año ha registrado el cierre de una universidad de la Arquidiócesis de Managua, arrestos de sacerdotes, expulsión del país de religiosas y la corte de relaciones diplomáticas con el Vaticano.
— Elvin Sandoval y Merlin Delcid contribuyeron a este informe.