Sánchez resiste el empujón de la derecha – POLITICO

MADRID (AP) — El titular Pedro Sánchez se mantendrá como primer ministro de España luego de las inconclusas elecciones nacionales del domingo en las que el Partido Popular de centro-derecha ganó la mayoría de los votos pero carecía de un camino claro para formar un gobierno.

Como era de esperar, ninguno de los principales partidos españoles obtuvo una mayoría gobernante. Con el 99% de los votos, el Partido Popular obtuvo 136 escaños, los socialistas 122, la extrema derecha Vox 33 y la izquierda Sumar 31.

Antes de la votación, el líder conservador Alberto Núñez Feijóo indicó que estaría dispuesto a formar un gobierno de coalición con Vox, pero los dos partidos no lograron asegurar los 176 escaños necesarios para controlar el parlamento español.

No hay ningún escenario en el que los diputados españoles apoyen a un gobierno minoritario formado por el Partido Popular y Vox, y Feijóo no parece tener suficiente apoyo entre los partidos regionales más pequeños del país para inventar el respaldo que necesitaría para gobernar solo.

El resultado abre la puerta a que Sánchez se mantenga en el poder.

Junto con la coalición izquierdista Sumar de Yolanda Díaz, el Partido Socialista del Primer Ministro podría formar una coalición que controle 153 escaños en el parlamento, pero para gobernar tendrá que llegar a acuerdos con una variedad de grupos políticos con objetivos muy diferentes.

Es poco probable que Sánchez gane el apoyo de los 176 diputados que buscan la confirmación como primer ministro la primera vez que el nuevo parlamento discuta el tema, pero podría hacer una oferta en la segunda ronda de votación, en la que se espera que el candidato para encabezar el nuevo gobierno reciba más síes que no.

En 2019, Sánchez se convirtió en presidente del Gobierno siguiendo esta misma hoja de ruta tras alcanzar acuerdos con partidos regionales. Pero en esta elección de alto riesgo, los votantes optaron por respaldar a los partidos más grandes, lo que provocó que grupos más pequeños como Teruel Existe perdieran sus escaños.

Esto significa que los socialistas tendrán que buscar el apoyo de los nacionalistas vascos y catalanes, entre ellos los pertenecientes al partido Junts del expresidente catalán Carles Puigdemont.

Puigdemont huyó de España tras el referéndum de independencia de Cataluña de 2017 y posteriormente fue elegido miembro del Parlamento Europeo; un tribunal superior de la UE levantó recientemente su inmunidad legal, allanando el camino para su extradición a España.

La candidata de las Junts, Míriam Nogueras, dijo a la prensa que su partido «comprendió el resultado» y «aprovecharía».

«Es una posibilidad de cambio, de encontrar la unidad», dijo. “Pero no nombraremos presidente a Pedro Sánchez a cambio de nada”.

Más de 37 millones de españoles se han registrado para votar en las elecciones, que se han anunciado como un referéndum sobre Sánchez. La reñida carrera significó que había mucho en juego, con España enfrentando la posibilidad de terminar con un gobierno con ministros de extrema derecha por primera vez desde la muerte de Francisco Franco.

Podría haber señalado un cambio radical más amplio en Europa antes de las elecciones al Parlamento Europeo del próximo año y haber alimentado a las fuerzas de derecha que quieren que la UE adopte posturas más duras en todo, desde la política climática hasta la migración.

Con 33 escaños, el partido de extrema derecha Vox sigue siendo el tercer grupo político más grande en el parlamento español, pero esta elección lo ha visto retroceder desde los 52 escaños que ganó en 2019, lo que indica que el grupo puede estar perdiendo impulso.

El domingo por la noche en la sede del Partido Socialista en Madrid, simpatizantes eufóricos aplaudieron a Sánchez al grito de “¡No pasarán! », el lema antifascista utilizado por el legítimo gobierno español en su lucha contra las fuerzas de Franco durante la Guerra Civil Española.

A pesar de celebrarse en pleno verano y con el calor del sol, unos 24 millones de españoles votaron de forma presencial, mientras que un récord de 2,4 millones optaron por el voto por correo.