En la COP16 en Cali, las universidades colombianas confirmaron su papel clave en la protección de la biodiversidad al firmar un importante compromiso. El panel titulado «Las universidades como impulsoras del cambio» discutió la responsabilidad de las instituciones de educación superior en la preparación de los ciudadanos para la crisis ambiental.
Raquel Bernal, rectora de la Universidad de los Andes, enfatizó la necesidad de acelerar el cambio en la educación universitaria hacia un enfoque más interdisciplinario relacionado con los problemas globales y nacionales. John Jairo Arboleda, de la Universidad de Antioquia, destacó el papel transformador de la educación pública en la creación de soluciones inclusivas a los problemas ambientales.
Un momento clave fue la presentación de la Declaración sobre el Acuerdo de Facultades Científicas, firmada por más de 50 facultades, que expresa el compromiso de actualizar los planes de estudio para alcanzar los objetivos del Convenio sobre la Diversidad Biológica 2030.
Ricardo Moreno, viceministro de Educación Superior, enfatizó que los planes deben transformarse en acciones efectivas. Hernando García, colega del Instituto Humboldt, destacó el papel de los nuevos Centros Regionales de Conocimiento en la gestión de la diversidad biológica.
Finalmente, el panel concluyó con un llamado a la cooperación continua entre el gobierno, el sector privado y las comunidades. Durante el evento, varias universidades del Valle del Cauca organizaron actividades que se centraron en la intersección de salud, biodiversidad y calidad de vida, destacando el papel fundamental de la educación en la construcción de un futuro sostenible.